miércoles, 1 de julio de 2015

Cuando beso tu boca
no existe el miedo.
Desde que existes 
en mi vida y
comparto la vida contigo,
creo en el amor
y te amo
porque me enseñaste
y me enseñas 
a diario
a quererme
a mí primero.

2 comentarios:

  1. Un amor reflejo, no por irreal, sino más bien por verdadero, es aquél en el que te miras para verte a ti primero.

    Bonito poema.

    ResponderEliminar
  2. Aún creyendo incapaz al ser humano de amar, al menos en su sentido habitual, si que creo que para querer hay que quererse primero a uno. Ya te dije, querer a alguien es quererse menos a uno mismo para poder querer a la otra persona.

    Sigue escribiendo Marisa.

    ResponderEliminar